Hoy es un día, una noche, de celebraciones y festejos, ya que (por suerte o por desgracia) los humanos somos seres gregarios, así que aunque la fría lógica nos invita a pensar que hoy es un día como otro cualquiera, la realidad se muestra distinta y la sociedad a veces toma el control.
Pero no sólo es eso, sino que, además, el finalizar un año lo percibimos como un momento de transición en nuestras vidas en el que hacemos una valoración retrospectiva de lo que nos ha pasado durante todo este año, tanto a nosotros, en nuestro día a día y vida personal, como al resto del mundo, las noticias que vemos cada día, las que más nos impactan, las que nos tocan la fibra sensible o las que vivimos de cerca.
Y aquí estamos, una vez más haciendo esa valoración, y miramos atrás y ahí están, nuestros errores, de los que procuramos aprender para intentar no volver a cometer, nuestros aciertos...
Máquina del tiempo. H.G. Wells. |
Una vez hecho recopilación de nuestro pasado, y analizado nuestros errores, no nos olvidemos de disfrutar de los buenos momentos, que aunque los pretendan eclipsar los malos, no hay que dejarlos, y pensar en lo que hemos disfrutado en este año que se termina.
Seguimos nuestro recorrido y por supuesto los momentos que he mencionado, tanto buenos como malos, van ligados a personas, como dije en un principio, somos un ser gregario, así que intentamos pasar nuestra vida en compañía, y ahí entra en juego la gente que nos rodea, la nueva gente que ha entrado en nuestra vida durante este año, la que perdura, la que se fue, la que hemos echado de menos, la que seguimos echando de menos.
Railway to the future. |
Pero una vez más, nuestro viejo amigo el tiempo vuelve a hacer acto de presencia, y hace que, al igual que el pasado es inalterable, el futuro sea incierto, impredecible... podemos hacer previsiones, ideas, pero al final el tiempo tiene siempre la última palabra. No le importan nuestras ilusiones o nuestros miedos, es implacable a la hora de ejecutar su marcha hacia adelante.
Y ahora podréis estar pensando "pero.. lo que pase es producto de tus actos y decisiones, ¿no?" y tenéis razón, por supuesto que todo depende de nosotros, de lo que queremos o lo que nos es impuesto, pero a la vez es el tiempo el que de verdad se encarga de desarrollar esos actos individuales, de mezclarlos, agitarlos y darnos el producto resultante, producto el cual, suele ser completamente incierto y no siempre se parece a nuestra idea inicial. Y una vez te das cuenta de eso puede marearte esa sensación de incontrol, o quizá reconfortarte al pensar que falsamente te libras de responsabilidad, o un poco de ambas cosas.
Y ya terminando, y entrando a bocajarro en lo personal, (ahora, por favor, tened a mano la dosis de insulina si os sentís aludidos) y daré las gracias a todos los que han compartido este año conmigo, los que me han ayudado cuando más los he necesitado y que están ahí aún en la distancia, los que han perdonado mis errores y han demostrado ser excelentes personas, a los que para bien o para mal han pasado por mi vida este año y, en definitiva y resumiendo, a todos los que han puesto su granito de arena para construir mi 2011 y también a todos con los que espero poder construir mi 2012.
Ahora podéis escuchar a The Killers y relajaros, el año ya se acabó.
The Killers - All these things that I've done (Todas esas cosas que he hecho)
Bien, si habéis leído hasta aquí sin aburriros o pensar lo rematadamente loco que debo de estar, ¡enhorabuena!. Esto realmente sólo son reflexiones sobre los caprichos del tiempo aderezadas con experiencias de mi año que termina e ideas sobre el que empieza.
Bueno, y, como no, tras un análisis personal del año, es de obligado repaso el año vivido por el mundo, un año convulsionado, que parece ser solo la antesala de lo que nos espera en el nuevo año que llega, tsunamis, accidentes nucleares, revolución árabe, el mundo en tensión, la economía derrumbándose, un gobierno que va de mal en peor, en fin, que decir que no sepáis ya, pero... mucho mejor que yo, el siguiente vídeo resume el año del mundo:
Y ya está, ya lo he dicho todo, o quizás aún no dije nada. Y si no habéis entendido nada es hasta normal, no debéis preocuparos.
Un saludo a todo el que me haya leido.
PD: ¡Feliz año nuevo!